Muere Rodney el hombre que vendió su historia de la brutal paliza de 1991







Rodney King, el afroamericano cuya paliza en marzo de 1991 a manos de siete agentes de la policía de Los Ángeles provocó una guerra racial, ha muerto este domingo a los 47 años. Es un final trágico para una vida marcada por aquel incidente y por años de delincuencia, después de que su novia confirmara que el cadáver apareció flotando en la piscina de su casa de Los Ángeles.
King ha muerto dos meses después de que se cumplieran 20 años de las revueltas callejeras que surgieron tras su sonora paliza. En total,murieron 53 personas y las pérdidas en la batalla campal con las autoridades rondaron los 1.000 millones de dólares.
Entonces confesó que estaba al borde de la bancarrota y que los problemas con las drogas y el alcohol habían persistido durante las últimas dos décadas de su vida. De hecho, el día que fue detenido por toda aquella avalancha de agentes de policía, trató de huir por conducir embriagado y con el temor a violar la libertad condicional. Con 25 años, King había sido condenado por un robo en abril de 1991.
"Sentí que estuve a un palmo de la muerte", dijo hace dos meses en una entrevista en 'Los Angeles Times', además de asegurar que estaba en paz consigo mismo y con lo que pasó. "Cambiaría algunas cosas de mi vida, pero no mucho".
Aún se desconocen las causas exactas de su muerte, pero se sabe que no tenía trabajo y que atravesaba una situación personal difícil. Su repentina fama le ayudó a conseguir dinero y una indemnización de la ciudad por 3,8 millones de dólares, un capital que se esfumó con el paso de los años.


Rodney King intentaba escapar de la policía cuando fue golpeado por cuatro oficiales (AFP/Archivo).


Rodney King, cuya golpiza a manos de la policía de Los Ángeles y la posterior absolución de los cuatro agentes implicados, que derivó en los disturbios de 1994, fue hallado muerto este domingo en su alberca, confirmaron autoridades y su prometida. Tenía 47 años.
La policía de Rialto, California, recibió una llamada de la novia de King, Cynthia Kelly, al 911 a las 5:25 de la mañana, dijo el capitán Randy DeAnda.
Tras encontrar a King en el fondo de la piscina, oficiales lo sacaron para realizar la reanimación cardiopulmonar hasta que llegaron los paramédicos. Fue declarado muerto en un hospital local, informó la policía.
En el cuerpo de King no se hallaron señales de lesiones, dijo DeAnda. "Su novia lo escuchó en el patio trasero", y cuando salió encontró a Rodney en la piscina. 
Kelly era una integrante del jurado en el juicio contra King en la ciudad de Los Ángeles en 1994.
La golpiza contra King, captada por las cámaras de seguridad, ocurrió después de una persecución de coches a alta velocidad. Sus consecuencias cambiaron para siempre la ciudad, su departamento de policía y el diálogo sobre asuntos raciales en Estados Unidos.
King tenía 25 años y estaba en libertad condicional tras una condena por robo en abril de 1991. En una entrevista realizada en 2011, recordó que había estado bebiendo y que se dirigía a su hogar desde la casa de un amigo cuando vio que lo seguía un coche de la policía y entró en pánico al pensar que sería enviado de vuelta a la cárcel. Por lo tanto intentó escapar.
“Tenía que ir a un trabajo ese lunes, y sabía que estaba bajo libertad condicional, y se suponía que no debía beber. Pensé ‘Oh, Dios’”, dijo a CNN.
Se percató que no podía escapar de la policía, pero buscó un lugar público para detenerse. “Vi  todos esos apartamentos ahí, así que dije, ‘voy a parar ahí’”, dijo. “Si algo sale mal, alguien lo verá”.
Un camarógrafo amateur captó la escena cuando cuatro policías blancos golpearon a King en más de 50 ocasiones con sus bastones de madera y emplearon una pistola paralizante contra él.
King dijo que mientras los policías lo golpeaban, le gritaron: “vamos a matarte negro”, aunque los policías negaron haber utilizado insultos raciales.
El video muestra a King encogido en el suelo y tratando de arrastrarse mientras está rodeado por un montón de policías. Cuatro de ellos emplearon sus bastones para golpearlo.
King fue golpeado casi hasta la muerte. Tres cirujanos lo operaron durante cinco horas.
El video de la golpiza apareció en los canales de televisión del país dos días después, centrándose  en el tema de la brutalidad de la policía por motivos raciales.
“Por fin captamos al monstruo del Lago Ness con una cámara de video”, dijo el abogado de King, Milton Grimes.
Cuatro agentes del Departamento de  Policía de Los Ángeles —Theodore Briseno, Laurence Powell, Timothy Wind y el sargento Stacey Koon— fueron acusados ​​por cargos de agresión con una arma mortal y el uso excesivo de la fuerza por un agente de la policía.
Pero después de un juicio de tres meses en el predominantemente blanco suburbio de Simi Valley, en Los Ángeles, tres de los policías quedaron absueltos de todos los cargos. El jurado, que no estaba compuesto por blancos, entró en punto muerto en el asunto del uso de fuerza excesiva por parte de Powell, y se declaró juicio nulo por ese cargo.
El abogado de Powell, Michael Stone, dijo a principios de este año que el video no editado resultó desfavorecedor para la causa de King y ayudó a probar el caso de los policías.
“Gran parte del país sólo vio algunos fragmentos en los que había más violencia”, dijo Stone. “La gente no vio (a King) levantarse y abalanzarse sobre Powell.
Sin embargo, la población negra de Los Ángeles estalló en indignación. Algunos corrieron por las calles, saqueando negocios, incendiando edificios y atacando a los que estaba en el lugar y momento equivocado. La violencia fue responsable de más de 50 muertes y 1,000 millones de dólares en daños a la propiedad.
En el tercer día de disturbios, King salió de su aislamiento para exhortar a los demás: “Gente, sólo quiero decir, '¿podemos llevarnos bien? ¿Podemos llevarnos bien?'”

Comentarios

Entradas populares de este blog

El rey Enrique VIII de Inglaterra era lujurioso y gay

Navidad 2023

Que los tuareg se unan a Al Qaeda es increible