El Real Madrid ha fracasado solo un titulo
937 'kilos' invertidos desde la novena no han asegurado el pase a la final
Ayer se cumplieron 3.633 días desde que el Real Madriddisputó, el 15 de mayo de 2002, su última final de unaChampions League. Y pasados esos 3.633 días, el conjunto blanco sigue sin saborear las mieles de una finalísima continental.
De nada le han valido a Florentino Pérez, a sus sucesores y de nuevo al propio Florentino derrochar los millones como si la crisis no fuera con el Real Madrid para cumplir el reto de las dos 'manitas' de 'orejudas'.
De nada les ha valido traer a una galaxia que va desdeRonaldo Nazario a Cristiano Ronaldo
pasando porBeckham, Owen, Robinho, Robben, Sneijder, Huntelaar, Kaká, Benzema, Di María, Higuaín, Ozil y muchos más, hasta un total de 62 jugadores por los que el Real Madrid ha pagado, desde aquel lejanísimo 15 de mayo de 2002, la friolera de 937'3 millones de euros. Sí, sí, han leído bien: casi 166.000 millones de las antiguas pesetas invertidos en diez años.
Una década en la que el Barça ha conseguido tres galardones continentales, imponiendo un modelo que se ha demostrado eficaz con títulos, con espectáculo y con una filosofía que ha enamorado al mundo entero y de la que se contagió la selección española para alcanzar la Eurocopa de 2008 primero y el Mundial de 2010 después.
El modelo del talonario ha fracasado. El fútbol no son sólo millones de euros. Al fútbol no siempre ganan los más guapos, ni los más mediáticos. Ni mucho menos los más caros. Ni los tramposos, ni aquellos que tergiversan la verdad para arrimarla a sus intereses.
No, este modelo no funciona. Cierto, puede dar algún título (una Copa del Rey la pasada temporada, una Liga en el presente curso) pero a medio o largo plazo no tiene una continuidad ni en el palmarés ni en el podium.
Hoy el madridismo se relame las heridas de una eliminación dolorosa, como lo fue la del Barça ante el Chelsea. Muchos merengues ya se veían el 19 de mayo en Múnichalzando la décima, esa con la que sueñan hace sólo 3.633 noches. Habían vendido la piel del oso antes de cazarlo. Y así les fue.
El Bayern les demostró que sí, que es su 'bestia negra', que esa leyenda que, según Mourinho, habían inventado para asustarles antes del partido de ida era real, cierta. Y los bávaros se plantaron en la final del 19 de mayo, en 'su' final, con todas las de la ley.
Florentino, desde el palco, asistió atónito al espectáculo de la eliminación de un Real Madrid al que le bastaba con el 1-0 para meterse en la final con el Chelsea. Con el equipo de Mourinho. Un técnico que ha declarado su amor al Chelsea y al Inter, pero no al Real Madrid.
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